La Noche Alada: Profundidad y Anhelo en Rumi
Creado el: 1 de junio de 2025

En brazos inquietos yaciendo insomne — lo profundo llama a lo profundo: y la noche tiene alas. — Rumi
Las Inquietudes de la Vigilia
Rumi empieza evocando la imagen de un cuerpo insomne, revelando el escenario íntimo de una noche vivida con agitación interna. La vigilia, lejos de ser únicamente física, refleja también inquietudes espirituales o emocionales. Así, el lecho nocturno se transforma en un espacio de reflexión, donde el descanso esquivo da paso a preguntas y deseos sin resolver.
El Llamado de la Profundidad
A continuación, aparece una poderosa metáfora: 'lo profundo llama a lo profundo'. Esta frase sugiere un diálogo entre las capas más hondas del ser, recordando a versos de los Salmos (42:7) y a la mística sufí—donde el alma anhela conectarse con su propia esencia y con lo divino. En la noche, las barreras se disuelven y los deseos auténticos se hacen audibles, invitando a una exploración más allá de lo superficial.
La Noche como Espacio de Transformación
No es casual que todo ocurra durante la noche; en la tradición poética de Rumi, la oscuridad simboliza tanto el misterio como la oportunidad de renovación. Las horas oscuras, aunque inquietas, ofrecen la posibilidad de una metamorfosis interna. Así, la noche deja de ser sólo un telón de fondo y se erige como protagonista en el proceso de autodescubrimiento.
Las Alas de la Noche y el Vuelo Interior
El verso final, 'y la noche tiene alas', introduce la idea de elevación. En muchas culturas, las alas representan la libertad del espíritu, y aquí la noche misma se presenta como un vehículo para volar hacia realidades interiores más sutiles. Al igual que en otras obras de Rumi—como en su famoso 'Masnavi', donde el alma ansía regresar a su origen—la noche alada conduce al buscador hacia nuevas alturas de comprensión y experiencia.
La Unión entre Anhelo y Trascendencia
Finalmente, estos versos nos recuerdan que el insomnio, lejos de ser sólo sufrimiento, puede ser también la antesala de la revelación. El anhelo nocturno y la comunicación de lo profundo llevan, gradualmente, a una experiencia trascendente. Así, en la poesía de Rumi, la inquietud y el misterio nocturno se convierten en caminos hacia lo sagrado, mostrando que la vulnerabilidad puede derivar en alas para alcanzar lo infinito.