La Felicidad Se Encuentra en el Camino, No en la Meta
Creado el: 18 de julio de 2025

Todos quieren vivir en la cima de la montaña, pero toda la felicidad y el crecimiento ocurren mientras la estás escalando. — Andy Rooney
El atractivo de la cima
Andy Rooney señala una verdad universal: la mayoría de las personas sueñan con alcanzar la cima de la montaña, entendida como el logro de sus metas más ambiciosas. El deseo de llegar a este ‘pico’ impregna nuestra cultura, desde cuentos de éxito empresarial hasta relatos de superación personal. Sin embargo, este enfoque exclusivo en la meta muchas veces nos hace pasar por alto los momentos significativos que se esconden en el proceso mismo.
La importancia del proceso
Lo esencial, según Rooney, no está en el destino final, sino en el trayecto que conduce a él. Este periodo de esfuerzo, aprendizaje y superación personal es el verdadero motor del crecimiento. En obras como ‘El Alquimista’ de Paulo Coelho, el protagonista descubre que la sabiduría adquirida durante el viaje es tan valiosa como el tesoro que busca. Así, el proceso se transforma en una fuente inagotable de felicidad y auto-descubrimiento.
Crecimiento a través del desafío
A medida que escalamos nuestra montaña personal, nos enfrentamos a desafíos y obstáculos que, aunque difíciles, contribuyen enormemente al desarrollo de nuestra resiliencia y carácter. La psicología positiva, representada por autores como Martin Seligman, sostiene que el sentido y propósito de la vida se encuentran al superar adversidades, no al evitarlas. Así, cada paso arduo se convierte en una oportunidad de crecimiento.
Momentos de felicidad inesperada
Es precisamente durante la subida cuando se experimentan las pequeñas alegrías que dan sentido a la vida: una conversación alentadora, un logro improvisado, un paisaje sorprendente. Tal como relata Cheryl Strayed en su memoria ‘Wild’ (2012), los instantes de mayor plenitud suelen surgir cuando uno menos los espera, en medio del esfuerzo y la incertidumbre. Estos momentos cimentan recuerdos y aprendizajes duraderos.
Redefiniendo el éxito personal
Finalmente, Rooney invita a replantear nuestra concepción del éxito. Más allá de las metas convencionales, el éxito puede medirse por la riqueza de experiencias adquiridas en el camino. Adoptar esta perspectiva no sólo disminuye la ansiedad ante el futuro, sino que también permite disfrutar verdaderamente del presente. De este modo, la vida se convierte en una sucesión de aventuras significativas, más que en una carrera interminable hacia una cima lejana.