Puentes desde la escucha, no desde la victoria
Creado el: 11 de octubre de 2025
Tiende puentes con el lenguaje de la escucha, no con el triunfo de demostrar — bell hooks
El giro ético de hooks
Al inicio, la frase de bell hooks invita a cambiar la métrica del intercambio humano: tejer puentes mediante la escucha en vez de ganar demostrando. En su ensayo pedagógico, hooks propone una ética del cuidado y la reciprocidad que desarma lógicas de dominación (bell hooks, Teaching to Transgress, 1994). Al sustituir el impulso de “tener razón” por la disposición a comprender, la conversación deja de ser un campo de batalla y se vuelve un espacio de co-creación.
La escucha como acto político
Luego, si escuchamos como acto político, practicamos una redistribución del poder simbólico. Paulo Freire sostuvo que el diálogo horizontal libera a quienes aprenden al reconocerlos como sujetos de palabra, no objetos de instrucción (Pedagogía del oprimido, 1968/1970). En esa línea, hooks extiende la escucha a las aulas, movimientos y relaciones íntimas: cuando todas las voces son acogidas, emergen alianzas antes impensables.
Del debate al diálogo
A continuación, pasar del triunfo retórico a la comprensión mutua redefine el propósito del encuentro. Martin Buber distinguió el vínculo Yo-Tú del trato utilitario Yo-Ello (Yo y Tú, 1923), y esa distinción ilumina la intuición de hooks. En un seminario, por ejemplo, preguntar “¿qué te preocupa de esta idea?” abre un puente; en cambio, el gesto de “déjame probar que te equivocas” levanta murallas.
Prácticas cotidianas de escucha
De ahí que la escucha requiera técnicas concretas y una disposición ética. Prácticas como las preguntas abiertas, el parafraseo empático y el uso deliberado del silencio sostienen la conexión; la Comunicación No Violenta propone observar sin juzgar y nombrar necesidades (Marshall Rosenberg, 1999). Estas microhabilidades no son ornamentos: calibran el clima emocional y reducen la reactividad.
Reparación y justicia relacional
Asimismo, a escala colectiva la escucha es reparadora. La Comisión de la Verdad y Reconciliación de Sudáfrica mostró cómo narrar y testimoniar, ante una escucha pública, puede abrir caminos de perdón sin borrar la responsabilidad (Desmond Tutu, No Future Without Forgiveness, 1999). No se trata de “ganar el pasado” con argumentos, sino de reconocer el daño para que la convivencia sea posible.
Un liderazgo que escucha
Por último, el liderazgo que escucha transforma culturas. Robert Greenleaf llamó a este enfoque “liderazgo servicial” (1970), donde la primera pregunta es: “¿han crecido las personas?”. En equipos que privilegian la curiosidad sobre la refutación, la innovación y la confianza florecen; así, siguiendo a hooks, tender puentes se vuelve una estrategia eficaz y una postura ética ante el otro.