El deseo mutuo y la importancia de actuar
Creado el: 31 de mayo de 2025

Todo lo que deseas también te desea a ti. Pero tienes que actuar para conseguirlo. — Jules Renard
La reciprocidad de los deseos
Jules Renard nos invita a considerar una visión poética y optimista de la vida: aquello que anhelamos también nos anhela. Esta idea sugiere que los sueños y metas no son simples fantasías, sino objetivos alcanzables porque, en cierto modo, existe una conexión natural entre nuestras aspiraciones y su realización potencial. En la literatura universal, desde los mitos hasta los cuentos populares, se repite este tema de una realidad dispuesta a corresponder nuestras pasiones más profundas, lo que motiva a las personas a no descartar sus deseos como imposibles.
El papel de la acción en el logro de los sueños
Sin embargo, la frase enfatiza que el deseo no basta por sí solo: hay que actuar. Como señala Renard, el universo puede alinearse con nuestros anhelos, pero solo si tomamos la iniciativa. Esta idea resuena con las palabras de Goethe, quien afirmaba que en el momento en que uno se compromete, la providencia da un paso adelante. Tanto en la filosofía como en la autoayuda contemporánea, encontramos el mismo mensaje: la acción es el puente entre la intención y la realidad.
El equilibrio entre esperanza y esfuerzo
De este modo, surge la necesidad de equilibrar esperanza y esfuerzo. Soñar otorga dirección y energía, pero la voluntad de actuar es lo que transforma ese deseo en logro. La historia está llena de ejemplos, como el de Marie Curie, quien perseguía con tenacidad sus investigaciones, superando obstáculos sociales y personales. Su deseo de contribuir a la ciencia ‘la deseaba a ella’ en el sentido de Renard, pero sólo su dedicación incansable lo convirtió en realidad.
El deseo como motor del cambio personal
En muchos casos, el deseo es lo que impulsa al individuo a crecer y transformarse. Desde artistas hasta deportistas, quienes alcanzan grandes metas suelen hablar de una sensación interna de que su vocación ‘los llama’. Sin embargo, ese llamado sólo se concreta cuando la persona responde con perseverancia. Así, el deseo se convierte en un motor inicial, pero necesita del combustible de la acción constante para avanzar.
Persistir a pesar de las dificultades
No obstante, actuar no garantiza un camino libre de tropiezos. Renard nos recuerda, indirectamente, que hay que persistir, aun cuando los resultados tarden en llegar. Muchas veces, lo que deseamos se presenta tras desafíos inesperados o fracasos temporales. Como enseña la resiliencia, cada obstáculo superado a través de la acción refuerza el vínculo entre nosotros y nuestros sueños, hasta que finalmente convergen.