Entre la Anticipación y la Sorpresa: Lecciones de Tucídides
Creado el: 2 de junio de 2025
Lo que anticipamos rara vez ocurre; lo que menos esperábamos generalmente sucede. — Tucídides
El Desafío de Predecir el Futuro
Tucídides, el historiador ateniense, introduce con su frase la dificultad intrínseca de prever el porvenir. A pesar de nuestros mejores esfuerzos por anticiparnos a los hechos, la realidad demuestra que el futuro es esquivo y suele desenvolverse de formas que no esperábamos. Esta incapacidad para adelantarnos a los acontecimientos ha fascinado a pensadores de todas las épocas, evidenciando que la incertidumbre es una constante en la vida humana.
Lecciones Históricas Sobre lo Inesperado
Este fenómeno se aprecia claramente a lo largo de la historia. Por ejemplo, en la propia *Historia de la Guerra del Peloponeso* de Tucídides, muchos bandos calcularon estrategias basadas en suposiciones que luego resultaron inexactas. La caída de Atenas, tan poco anticipada incluso por sus enemigos, es un recordatorio de que lo menos esperado puede cambiar el curso de los acontecimientos y alterar los planes más meticulosamente trazados.
El Sesgo Humano y la Falacia de Control
Continuando con este hilo, la psicología moderna explica nuestra tendencia a sobrevalorar nuestra capacidad para predecir el futuro como el 'sesgo de exceso de confianza'. Como mostró Daniel Kahneman en *Thinking, Fast and Slow* (2011), solemos creer que conocemos más de lo que realmente sabemos y subestimamos el impacto del azar. Así, no es sorprendente que lo inaudito termine tomando protagonismo cuando menos lo imaginamos.
El Valor de la Adaptabilidad
Frente a esta realidad, la adaptabilidad se convierte en una virtud indispensable. Las organizaciones, individuos y sociedades resilientes son precisamente aquellas capaces de responder ágilmente ante lo inesperado. Jumping adelante en el tiempo, Charles Darwin también argumentó en *El origen de las especies* (1859) que no sobrevive el más fuerte, sino el que mejor se adapta a los cambios, emparentando su pensamiento con la sabiduría de Tucídides.
Aceptación y Sabiduría Práctica
Finalmente, abrazar la incertidumbre y aceptar la llegada de lo imprevisto puede ser liberador. Filósofos como Séneca exhortaron a esperar lo inesperado para no ser tomados por sorpresa y, de ese modo, reducir el sufrimiento. Así, las palabras de Tucídides nos invitan a equilibrar la planificación prudente con la flexibilidad ante la sorpresa, cultivando una sabiduría práctica que nos ayuda a navegar el flujo azaroso de la vida.