El Amor Propio como Fundación de Toda Relación
Creado el: 1 de agosto de 2025

Primero debes querer pasar el resto de tu vida contigo mismo. — Rupi Kaur
La Esencia del Amor Propio
Rupi Kaur nos recuerda que antes de buscar la compañía de otros, es fundamental desear nuestra propia compañía. Este es un reconocimiento de que el amor propio no es egoísmo, sino la base de una existencia auténtica. Tal como lo explora la literatura de la autoayuda moderna, aprender a convivir con uno mismo implica aceptación, perdón y empatía por nuestros defectos y virtudes.
La Autocomprensión como Preámbulo de la Felicidad
Comprender quiénes somos y qué valoramos es crucial para cualquier tipo de felicidad duradera. Al igual que Sócrates aconsejaba 'Conócete a ti mismo' en la antigua Grecia, Kaur subraya que la introspección es primordial. Sólo así podemos identificar nuestras necesidades y establecer límites saludables, lo que previene vínculos dependientes o insatisfactorios.
Impacto en las Relaciones Interpersonales
Cuando una persona logra estar en paz consigo misma, sus relaciones personales se transforman. En vez de buscar que el otro llene vacíos internos, se interactúa desde la plenitud. El psicólogo Erich Fromm desarrolló esta idea en 'El arte de amar' (1956), donde explica que solo quien siente amor propio puede dar y recibir amor genuinamente.
Superando la Soledad y el Miedo al Autoconocimiento
Abrazar la idea de pasar la vida con uno mismo implica enfrentar momentos de soledad. Sin embargo, lejos de ser una condena, la soledad puede convertirse en una aliada para el crecimiento. Ejemplos como el diario de Ana Frank evidencian cómo el autodiálogo puede ser refugio, consuelo y herramienta de fortaleza ante la adversidad.
Construyendo una Vida Plena
Por último, elegirnos día a día sienta la base para una vida plena y consciente. Esta convicción nos permite construir proyectos, tomar decisiones y afrontar desafíos desde la autenticidad. Así, como concluye Kaur, el primer gran compromiso es con nosotros mismos: sólo entonces podemos compartir nuestra vida desde la abundancia, y no desde la carencia.