El Valor de la Ingenuidad según Rilke
Creado el: 5 de agosto de 2025

Atrévete a ser ingenuo. — Rainer Maria Rilke
El Significado Profundo de la Ingenuidad
Rilke nos invita a reconsiderar la ingenuidad no como debilidad, sino como una fuerza valiente. En una sociedad donde la desconfianza suele protegernos, atreverse a ser ingenuo implica rechazar el cinismo prevalente y abrirse a la experiencia con ojos nuevos. Esta disposición, como sugiere Rilke, puede ser la clave para descubrir verdades profundas y renovadas formas de ver el mundo.
La Ingenuidad Frente al Conformismo
Este llamado se enfrenta directamente al conformismo social, donde es más común camuflar la vulnerabilidad con indiferencia o ironía. Históricamente, figuras creativas han encontrado en la ingenuidad un terreno fértil para la innovación. Por ejemplo, en 'Cartas a un joven poeta' (1903), Rilke aconseja preservar la pureza interior, incluso contra el escepticismo ambiental, porque es allí donde germina la auténtica creatividad.
Ingenuidad como Fuente de Creatividad
Siguiendo este enfoque, la ingenuidad es también impulsora de la creatividad. Picasso afirmaba: 'Todos los niños nacen artistas; el problema es cómo seguir siendo un artista una vez que crecemos.' Solo quien se atreve a ver el mundo sin prejuicios ni certezas rígidas puede realmente innovar. Así, asumir la ingenuidad es un acto de resistencia contra la petrificación de la mirada adulta.
Vulnerabilidad y Confianza
Tener el coraje de ser ingenuo requiere vulnerabilidad y una confianza radical en los demás. Rilke plantea que esa apertura, aunque nos exponga a la decepción, nos permite compartir conexiones más auténticas. El filósofo Emmanuel Levinas defendía una ética de la bienvenida al otro, basada en la misma confianza inaugural que sugiere Rilke con su exhortación.
Cultivar la Ingenuidad en la Vida Cotidiana
Para concluir, integrar la ingenuidad en la vida cotidiana es apostar por la autenticidad y por nuevas posibilidades. Aunque pueda parecer arriesgado, es ese riesgo el que hace posible lo extraordinario. Como en la propia poesía de Rilke, ser ingenuo es atreverse a vivir con asombro, manteniendo viva la capacidad de maravillarse frente al misterio de la existencia.