En última instancia, Nietzsche nos invita a repensar nuestra relación con el sufrimiento. En lugar de rehuirlo o resignarnos, propone vivirlo creativamente, usándolo como materia prima para la autotransformación. Esta actitud, lejos de negar el dolor, lo integra y lo eleva, mostrando que incluso las experiencias más desgarradoras pueden ser fuente de crecimiento y belleza si elegimos convertirlas en arte. [...]