Por eso, conviene adoptar prácticas claras: tarjetas de modelo —Model Cards, Mitchell et al. (2019)— y fichas de datos —Datasheets for Datasets, Gebru et al. (2018)— favorecen transparencia y trazabilidad. La Recomendación de la UNESCO sobre la Ética de la IA (2021) enfatiza la dignidad humana, la inclusión y la rendición de cuentas. En la creación, se deben respetar licencias, atribuir inspiraciones y establecer límites de uso. Cuando combinamos estos principios con criterio y curiosidad, la IA deja de ser amenaza y se convierte en palanca para vidas más fáciles, ricas y llenas de propósito. [...]