Por último, adoptar este enfoque día a día fomenta la resiliencia. Cada jornada se vuelve una oportunidad renovada para ejercitar el coraje, acumulando pequeñas victorias personales que fortalecen la confianza en nosotros mismos. En suma, la cita de Radmacher nos invita a redefinir el coraje como un acto accesible —y suficiente— para el aquí y ahora. [...]