Finalmente, en una realidad dinámica donde los contextos cambian rápidamente, la adaptabilidad y el criterio ganado en la vida resultan esenciales. Los libros pueden volverse obsoletos, pero la capacidad de observar, aprender y adaptarse en tiempo real es lo que define a las personas sabias según Lichtenberg. Así, la vida se consolida como la fuente principal de sabiduría práctica frente a los desafíos contemporáneos. [...]