Concretando, conviene diseñar umbrales deliberados: 1) Diario de posibilidades: tres microoportunidades cada mañana. 2) Revisión de obra semanal: qué se avanzó y qué se replantea. 3) Prototipos de bajo riesgo: versiones de 30–60 minutos para probar ideas. 4) Red de conversación: citas quincenales con quienes amplían el horizonte. 5) Rituales de apertura: una caminata sin auriculares para escuchar preguntas. El enfoque de design thinking, popularizado por Tim Brown en “Change by Design” (2009), muestra que prototipar e iterar reduce el miedo y acelera el aprendizaje. Así, paso a paso, la casa de tu vida suma nuevas estancias y la posibilidad, como buena invitada, siempre encuentra una puerta encendida. [...]