Finalmente, pedir larga vida no es coleccionar calendarios, sino sostener el hilo del cuidado a través de estaciones. Implica recordar fiestas, escribir, volver a mirar el mismo cielo cuando el ánimo flaquea. La bendición de Su Shi es, entonces, compromiso: vivir lo suficiente para atesorar reencuentros y, mientras tanto, ejercitar la paciencia del ciclo lunar. De este modo, el poema no clausura en melancolía; abre un método: perseverar, mirar, compartir. [...]