Finalmente, esta distinción cobra aún más importancia en la era digital, donde el discurso abunda en redes sociales y plataformas virtuales. En ese contexto, la acción —donar, movilizarse, apoyar causas— revela auténticamente quiénes somos. Así, las palabras pueden cautivar momentáneamente, pero son los hechos los que dejan huella y forjan el legado perdurable, como lo demostró la propia vida de Benjamin Franklin. [...]