Finalmente, esta visión ética y sensible sigue inspirando a generaciones que enfrentan injusticias. Ya sea en activismos estudiantiles, protestas laborales o luchas contra el racismo, la frase del Che resuena como un llamado a no adormecer la consciencia. Así, quienes todavía sienten temblar las piernas frente al abuso reafirman su lugar como ‘compañeros’ en la búsqueda de un mundo más justo. [...]