Por último, Rilke aconsejaba ‘vivir ahora las preguntas’ en Cartas a un joven poeta (1903), confiando en que, algún día, se vivirá ‘sin darse cuenta, dentro de la respuesta’. Hurston añade una cadencia temporal: hay años enteros dedicados a esa vida interrogante.
Entre ‘chronos’ (el tiempo que pasa) y ‘kairos’ (el tiempo oportuno), su sentencia nos invita a cuidar el kairos: escuchar con atención cuando el año pregunta, y actuar con hondura cuando el año responde. En esa atención bifronte—paciencia y decisión—se teje una vida con sentido. [...]